Los trastornos de la conducta
alimentaria se presentan con relativa frecuencia en deportes en los que es importante
el control del peso corporal, tales como gimnasia rítmica, patinaje artístico o
deportes de resistencia. La incidencia es mayor en mujeres, manifestándose con
frecuencia una baja autoestima, una imagen corporal distorsionada en la que el
cuerpo es percibido con un exceso de peso, ineficiencia, perfeccionismo y un
sentido de pérdida de control, con un mecanismo compensatorio ejercido a través
de la manipulación de la comida y la utilización de métodos inadecuados de
control del peso. Con frecuencia se asocian en deportistas del sexo femenino a
irregularidades del ciclo menstrual, reducción de la densidad mineral ósea y
osteoporosis, dando lugar a la denominada tríada de la atleta femenina. Pueden
aparecer problemas cardiovasculares, una mayor incidencia de fracturas y
pérdidas de potencia muscular y resistencia que repercuten negativamente sobre
el rendimiento. Entre los factores de riesgo para su aparición se encuentran
los intentos de perder peso, muchas veces por recomendación del entrenador, los
incrementos del volumen de entrenamiento asociados a dichas pérdidas de peso,
rasgos de la personalidad que llevan a preocupación excesiva por la imagen
corporal, o lesiones y traumatismos. Su tratamiento requiere un abordaje
multidisciplinar, con participación de médicos, psicólogos/psiquiatras,
nutricionistas, entrenador y familia del deportista, siendo especialmente
importantes las medidas preventivas.
TCA y deportistas
Suscribirse a:
Entradas (Atom)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario